Hoy os voy a presentar un ejercicio tremendo para todos los
que practicamos las artes marciales o los deportes explosivos: carreras de
velocidad en cuesta (o hill sprints en inglés). Es un ejercicio muy
interesante. La cuesta nos enseñará como correr con la técnica correcta. Un
poquito de trabajo puede tener efectos impresionantes.
Antes de mirar el ejercicio en detalle, hay que mencionar
que practicarlo es una idea terrible para la gente con sobrepeso.
Si te sobran unos kilos, ponte a régimen antes de empezar. Si no sabes que
hacer, prueba dos o tres meses sin beber cerveza o refrescos y sin comer
bocadillos o bollos. Si todavía tienes sobrepeso después de esto, habla con un
nutricionista.
Si quieres empezar, recomiendo hacer estas carreras de
velocidad dos o tres veces por semana. Lo suyo es hacerlo cuando tengas 10
minutos los mismos días que vas al
gimnasio o al
kwoon. No es muy buena idea
hacerlo un día de descanso. Probablemente no hará falta ponerte ropa de deporte
o ducharte después.
Es importante encontrar una cuesta que te guste. Necesitas
40 a 80 metros entre dos puntos, por ejemplo, dos arboles o dos farolas. Tiene
que estar cerca de tu casa o de tu oficina.
La primera vez que lo hagas, pasa unos minutos calentando.
Luego tienes que hacer una carrera de velocidad fácil entre los dos puntos. Baja al
principio andando y luego arranca otra vez. Dos carreras están perfectas para
empezar.
Durante la primera semana, sigue con dos carreras fáciles en
cada sesión. La semana siguiente haz tres carreras fáciles en cada sesión. Cada
semana añade otra carrera fácil.
Es buena idea descansar después de tres o cuatro semanas de este trabajo. Si
estabas haciendo cuatro carreras antes de la semana del descanso, empieza otra vez con tres
y sigue aumentando el número de carreras desde allí.
Poco a poco, vas haciendo más trabajo. Cuando llegues a ocho
carreras fáciles, puedes empezar a aumentar la velocidad un poco. Usa las tres
primeras carreras para calentar y luego haces una a tope. Terminas con cuatro
carreras fáciles. Todas las semanas, aumentas la velocidad de una carrera.
Un buen objetivo sería hacer una carrera para calentar, seis
a tope y otra fácil para terminar. Si llegas a este punto, puedes empezar a
aumentar la distancia de todas las carreras o la velocidad de las que haces a
tope. No olvides la semana de descanso cada vez en cuando.